Según Inverco, el desarrollo de nuevos programas de pensiones avanza, elevando el número de partícipes hasta los 337.000 en el primer trimestre del año. En apenas unos meses, el plan colectivo del sector de la construcción ha evolucionado notablemente, convirtiéndose en un ejemplo a seguir. Asociaciones y autónomos recibieron apoyo de grandes bancos y gestoras de fondos de pensiones para abrir cuentas de ahorro para este grupo. Actualmente se ha alcanzado el 25% del objetivo, incluidos grandes sectores afectados por la reforma, como las comunidades autónomas.
En los primeros cuatro meses, de febrero a mayo, más de 436.000 empleados se incorporaron al programa de pensiones del sector de la construcción. Esto representa el 40% de los trabajadores del sector cubiertos por este mecanismo de emergencia. Si bien el plan está en desarrollo, la integración de limpiadores y trabajadores por cuenta propia en el sector plantea desafíos adicionales debido a la diversidad y el número de trabajadores por cuenta propia.
La industria de la construcción puede cubrir hasta un millón y medio de empleados en su programa de pensiones, tanto empresas como autónomos, en función de las características del sector. La negociación colectiva entre empleadores y sindicatos ha allanado el camino para que otros sectores, como el metalúrgico, los hoteles y los grandes almacenes, consideren la posibilidad de crear sus propios planes de pensiones.
Financieramente, los activos cubiertos por planes de contingencia han mostrado un crecimiento significativo. En los primeros tres meses del año se recaudaron más de 2.100 millones de euros, superando el total para 2023. Este aumento subraya el entusiasmo y las expectativas positivas que rodean estos planes.
El sector de la construcción es sólo el comienzo. La negociación colectiva sentó un precedente para que otros sectores, como el metalúrgico, la hostelería y los grandes almacenes, desarrollaran sus propios planes. Las empresas metalúrgicas, hoteleras y de grandes almacenes están dispuestas a seguir este ejemplo.
En el sector financiero, muchas entidades como VidaCaixa, BBVA, Sabadell, Ibercaja y Santander están interesadas en utilizar este producto emergente. Los expertos predicen que los nuevos planes de pensiones pueden atraer hasta 1,5 millones de autónomos.
Diversos sectores han mostrado interés y optimismo. El sector metalúrgico está evaluando la viabilidad de implementar un plan de pensiones simplificado que podría beneficiar hasta un millón y medio de empleados. La hostelería, otro sector importante que emplea a dos millones de trabajadores durante la temporada alta, también está considerando incluir este beneficio en su Acuerdo Laboral Estatal.
Los planes de jubilación se consideran una herramienta valiosa para retener el talento en empresas y sectores. Permiten a los empleados acumular ahorros que pueden llevarse con ellos si cambian de trabajo dentro de la misma industria. Además, pueden resultar especialmente útiles para los extranjeros que trabajan en estos sectores.
El Ministerio de Inclusión Social, Seguridad Social e Inmigración también desempeña un papel clave en este proceso y se espera que aumente su apoyo y proporcione incentivos fiscales para estos planes. La patronal y los sindicatos del sector de los grandes almacenes están trabajando para elaborar un plan de empleo para 250.000 trabajadores, siguiendo el ejemplo de otros sectores.
Por otro lado, el principal plan de pensiones de España, que cubre a los empleados de la Administración General del Estado (AGE), permanece paralizado desde 2011. Pese al interés de la vicepresidenta y ministra de Hacienda María Jesús Montero, la reactivación de este plan depende más del Tesoro Nacional que del Servicio Público. Si se puede desbloquear, 1,5 millones de trabajadores del sector público podrían beneficiarse de él.
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